Conozca a Manuel: Asistente Administrativo de Mil Milagros, mago de las computadoras y el programador de múltiples aplicaciones del idioma Tzu’tujil.
Manuel, de 22 años, vive en San Pedro la Laguna, uno de varios pueblos por las orillas mágicas del Lago Atitlán. Todos los días él toma la lancha por el Lago a Panajachel para trabajar en la oficina de Mil Milagros, donde él trabaja como el Asistente Administrativo y agente de la informática. Él es responsable para el mantenimiento de las computadoras para la oficina y nuestras escuelas aliadas. Él también maneja a los bases de datos, entre otras responsabilidades. En su tiempo libre, Manuel es músico, futbolista y estudiante de la universidad. Habla tres idiomas: español, Tzu’tujil y inglés. No obstante, también es programador de aplicaciones y ya cuenta con tres aplicaciones.
Cuéntenos un poco de su trabajo con Mil Milagros.
Yo empecé de trabajar con Mil Milagros como voluntario en 2017. Eventualmente me ofrecieron un puesto como el Asistente Administrativo. Me gusta mucho el enfoque de Mil Milagros, especialmente por la forma en que apoyamos a los niños y a las madres. Me inspira. Cuando yo era pequeño, yo no tenía muchas oportunidades. Aprendí matemáticas y ciencia por una organización no gubernamental, así yo sé que tan importantes son las ONGs para muchos guatemaltecos.
¿Qué estudia en la universidad?
Yo estudio Ingeniería de Sistemas. Vamos a las clases todos los sábados entre las 8am - 6pm. Cuando yo empecé de aprender sobre la programación, solo recebíamos las clases básicas. Fue demasiado fácil para mí y yo quería aprender como hacer un base de datos más grande y crear más aplicaciones complicadas. Entonces, yo empecé de investigar y enseñarme como desarrollar mis propios proyectos.
Cuéntenos sobre las aplicaciones que usted hizo.
Por la universidad, recibimos una tarea que nos mandó de hacer un juego simple, Yo quería hacer algo más grande, por eso, yo me enfoque en desarrollar una aplicación que tenía diez niveles diferentes, solo a ver si yo pudiera realizarlo. Yo hice muchas búsquedas en el internet y por fin pude crear mi primera aplicación. Se llama Ch’oboj (la palabra Tzu’tujil para “pensar”). Es una aplicación que ayuda a la gente para aprender y recordar las palabras mayas, particularmente las de Tzu’tujil, lo que es la idioma nativa de San Pedro La Laguna. Mis compañeros y mi profesor estaban muy impresionados. Cada semana, yo colaboraba con mi profesor para mejorarla y después de cuatro meses yo la subí a la tienda Google Play. Yo me di cuenta que más que la mitad de las descargas vino de los niños de las edades 16 o menos, lo que me ponía muy alegre. Desde luego, yo he hecho cuatro más aplicaciones. Tres de ellas son juegos de idioma, en los que uno aprende como escribir los números y las palabras en Tzu’tujil. También yo he desarrollado una aplicación diccionario de Tzu’tujil. Ésa me tomó un rato. Yo consultaba a siete diccionarios diferentes para aprender y agregar todas las palabras.
¿Qué le gustaría hacer en el futuro?
Yo quiero crear más aplicaciones que ofrecen la educación gratis a toda la gente que la necesita. También me gustaría crear una aplicación o base de datos para el equipo de Mil Milagros en sus celulares. Por ejemplo, nuestras Coordinadoras Comunitarias podrían utilizar esta aplicación para ver a todos sus archivos, entrar los datos y tasas y también para manejar a sus horarios.
¿Cuál es aspecto que le gusta más de la programación?
Cuando yo era niño, siempre consideraba a los programadores como los superhéroes. Ellos estaban creando bases de datos y sistemas que verdaderamente podían ayudar a la gente. Yo jamás pensaba que yo sería uno de ellos. Me gusta utilizar mis habilidades para hacer algo bien. Yo observo a tantos niños que no pueden hablar Tzu’tujil. Ellos no se dan cuenta de su propia identidad. Mis aplicaciones están apoyando de préserver Tzu’tujil para que las generaciones más jóvenes saben de dónde vienen.